El Ataque de los ‘Bad Beats’ Asesinos

Entre los correos del día, hoy he recibido uno que dice: «Soy un yonqui de tu diario y últimamente no me estás suministrando las papelinas que necesito. Escribe al menos una entrada corta, jodío». La verdad es que, por motivos personales que no voy a relatar, estos días no tengo ganas de escribir, ni de jugar, ni de nada. Pero bueno, creo que no estaría bien dejar a un yonqui sin sus papelinas.

Había contado que me estaba jugando los cuartos en 888Poker. Bueno, en 888 y en otras salas al mismo tiempo, ya que 888 no permite el juego multimesa. Las oscilaciones de bankroll en 888Poker, como cabía esperar, han sido brutales. Pasé de los $500 iniciales a tener más de $1,000 en un par de sesiones. Luego bajé a $0. Sí, sí, a $0. En medio de una mano salvaje me quedé all-in.

Nunca antes había llegado a la situación extrema de estar all-in en una mano y no tener dinero para seguir apostando. Sé que tendría que haber hecho un ingreso mucho antes de llegar a eso, pero… pero me pudo el orgullo, qué queréis que os diga. Además, estaba asqueado de tanto bad beat, y me dije, ¡a tomar por saco! El caso es que tuve suerte y gané esa mano crucial, y a partir de ahí subí en cuatro días a $2,100. Parecía que tenía la situación bajo control cuando, de nuevo… ¡zas!, El Ataque De Los Bad Beats Asesinos.

Ya sabéis de qué va la cosa, así que no me recrearé en el asunto. Perdí 160 big bets del tirón y de nuevo bajé a $500. Uf, uf, uf. No sé vosotros, pero lo que es yo creo que nunca terminaré de acostumbrarme a las rachas negativas. En fin, gracias a que en InterPoker me fue bastante bien, acabé sacando un beneficio de todas esas horas dedicadas al poker. Y ahora me estoy tomando un descanso de 888Poker. Necesito practicar mis técnicas de relajación antes de volver a enfrentarme al Ejército de Enanos.